domingo, 16 de noviembre de 2008

Cómo definirlo...

AMOR: SENTIMIENTO O SÒLO ATRACCIÓN
> ¿Existe el amor a primera vista, único y para toda la vida, se trata de una cuestión esencial? Son preguntas que surgen cuando de entenderlo se trata. Las respuestas varían y nos ofrecen distintas perspectivas.


Amor, palabra de cuatro letras difícil de definir. Cómo hacerlo frente a una palabra tan abstracta y tan amplia? Resulta imperioso, puesto que no existe una definición única de amor, y mucho menos exacta. Es decir, muchas son las teorías que giran en torno a este tema y que permiten adicionar su aporte, pero esto no es suficiente para alcanzar la aclaración sobre qué es realmente, ya que deriva muchas concepciones y genera una red de significaciones inacabables, puesto que se mueve en un amplio espectro de definiciones, lo cual tampoco quiere decir que no se deba ir en busca de su significado o al menos noción. Ardua tarea constituye, y por lo general se cae en rótulos que no siempre son acertados. A partir de las experiencias, cada uno va tratando de hallar los significados que mejor cuadren a un término, muchas veces inasible en cuanto a traducción o definición certera. Al tratarse de algo muy abstracto varia la concepción que cada persona tenga de este sentimiento, pero lo cierto es que a lo largo de la vida los seres humanos atraviesan etapas en las que se ven involucrados sentimentalmente y de maneras muy distintas. Ello se debe a que las formas de amar dependen de la intensidad de la persona, la entrega para con el otro, la fidelidad y el respeto que se tenga a dicha relación. Hay quienes son partidarios de la premisa "mejor solo que mal acompañado", y se valen de esto o para estar solos y así evitar compromiso, o porque prefieren esperar un tiempo prudencial y allanar el terreno listo para la ocasión de encontrar a la persona indicada, aquel con quien decida compartir toda la vida, o momentos especiales. Sin embargo, algunos rechazan sin ambages aquellas modalidades que proponen el compartir todo con el otro, y tratan de reservarse para sí determinadas cuestiones que no consideran plausibles o apropiadas. También encontramos a aquellos que se rigen por la apariencia externa, y que solo les interesa el envase, como bien dicen "todo entra primero por los ojos", entonces nos preguntamos si el amor es un real sentimiento o pura atracción? Además, muchos creen en la existencia de un amor para toda la vida o de un amor a primera vista. Pero persiste aun esas formas de concebir el amor en los tiempos de hoy? Allí estriban las diferencias. El amor, sin proponérselo, se erige como un tema susceptible de debates y divergencias en cuanto a la amplitud que puede derivarse cuando se trata de comprenderlo. Pero sin caer en grandilocuencias, ni osar obtener una concepción magistral o profunda puede conocerse que es una especie de motor que muchas veces impulsa al ser humano y que es capaz de provocar actitudes impensadas. Es aquel sentimiento que funge de vivacidad, que da la pauta para ser felices. Es esa búsqueda incesante suscitada por nuestra insuficiencia, entonces se recurre a la unión con otro ser que nos atrae. Los seres humanos siempre persiguen afectos, emociones, sensaciones y saciar los deseos, por ello emprenden un camino estrecho que los lleve hacia esa otra mitad, anhelando que sea la apropiada, que tengan cosas en común, que sean el uno para el otro. Pero la candidez capaz de generar el amor puede dispersarse como un haz de luz que atraviesa un prisma y desembocar en la completa oscuridad, porque no todos persiguen los mismos fines. Hay quienes se embarcan sólo en la búsqueda de diversión, un rato de intensidad, pero a la hora de formalidades se amedrentan y optan por el no compromiso, muchas veces porque le temen, o simplemente porque consideran que no están preparados y se refugian en la soltería como el momento de disfrute. Lo cierto es que cada cual toma el rumbo que cree más conveniente de acuerdo a sus pretensiones. Por otra parte, amor implica pasión, sentimientos, fidelidad, respeto, compañerismo, y un sinfín de cuestiones que se conocen como integrantes de este todo tan abarcativo. Puede desprenderse de esto las inclinaciones de los individuos a la hora de buscar su pareja ideal. Muchas son las pretensiones, pero cuando el flechazo se produce, lejano está a veces de esas prioridades iniciales. Esto tiene que ver justamente con que cuando el amor llega no distingue aspectos que uno cree que son esenciales. Por ello suele decirse que los opuestos se atraen. Pero qué sucede con el amor en estos tiempos hedonistas. A diario convivimos en una sociedad signada por la falta de compromiso, el libre albedrío y la plena búsqueda de satisfacción. Por ello, a veces, resulta ilusorio pensar en el amor como aquel sentimiento sincero, profundo, cándido. Su esplendor se ve encandilado por aquellos que resignan amor por placer. Nos encontramos en una época de "hedonismo" y muchos se valen de éste para estar lo menos inmersos en las relaciones formales que demandan fidelidad, comprensión, lealtad. Al parecer el panorama es bastante oscuro, pero lo cierto es que a pesar de ello, el amor sobrevive y se encuentra presente en muchos ámbitos, no se trata de simples excepciones, sino de que a veces no se dan muestras de amor públicamente. Hay quienes propugnan férreamente que el amor todo lo soporta, todo lo vence, mismo en la Biblia, en el libro de Corintios se hace mención del mismo: "El amor es sufrido, es benigno; el amor no tiene envidia, el amor no es jactancioso, no se envanece; no hace nada indebido, no busca lo suyo, no se irrita, no guarda rencor; no se goza de la injusticia, mas se goza de la verdad. Todo lo sufre, todo lo cree, todo lo espera, todo lo soporta".1 Corintios 13:4-7 Hay quienes escogen derroteros diferentes para ir en busca de sus pretensiones, pero no puede pensarse en el amor sin dejar de asociarlo con algo bueno. Además, puede hablarse de un amor distinto según los ámbitos y las relaciones, puede hablarse de amor de pareja, de paternidad, de amistad y así surgen variantes de un sentimiento abarcativo.
En definitiva, nos encontramos con distintas formas de amar y la forma de llevarlo a cabo. Cada uno se rige según le parezca y así nos damos cuenta que queda abierta la definición del amor, por cuanto se trata de algo muy subjetivo y amplio.













martes, 9 de septiembre de 2008

Inquietud...

Hace cuánto tiempo que no subo algo al menos? Ha transcurrido un gran lapso desde el día en que cree este blog. Quizá lo hice por hacer, pero ahora siento la necesidad de darle un poco de vida. Muchas veces me encuentro en la situación de querer escribir, pero por una cosa o por otra no lo hago. Sin embargo, voy a aprovechar este pequeño espacio para expresar, tal vez no sean grandes cosas, pero sí lo son para mí.
Hoy en día atravieso uno de esos momentos en los que no sabes que te deparará el mañana, si bien no vivo afanada por el futuro, siento que se trata de una cuestión importante, porque a pesar de ser algo intangible y abstracto, no pierde su sabor ni deja de robarme algo de tiempo. Creo que muchos se preguntan qué pasará en sus vidas, si resultará su profesión o si estarán haciendo bien las cosas, supongo que serán inquietudes comunes a muchos y por ello difíciles de responder a ciencia cierta. Pero tengo por seguro que cada uno trata de elegir el camino que le parece más apropiado, y luego las circunstancias van afirmándolo o refutándolo.
Al avizorar el poco tiempo que resta para recibirme de periodista, surge en mí un poco de nostalgia, por un lado, porque noto que pasaron casi tres años de esfuerzo, y por el otro porque anhelo una vez finalizada la carrera, que ésta pueda ser fructífera, no solo a nivel económico, sino a nivel profesional y personal. Nadie tiene el futuro comprado ni asegurado, pero creo que dependiendo de las capacidades y el interés de cada uno, puede preveerse si nos irá bien o tendremos posibilidades, al menos.
Resulta tan extraño imaginarme en una labor periodística. Siempre está el miedo a no ser lo suficientemente capaces, a no estar preparados, a no tener como quien diría "pasta" para esto, pero también es cierto que podemos crecer, mejorar y avanzar en un camino que quizás resulta angosto y empinado, pero no por ello imposible. A diario podemos trasgredir la línea de lo cotidiano y lineal para pasar a un plano más profundo e ir más allá. Ojalá consiga insertarme en un trabajo acorde a mis estudios. De todas formas creo que la experiencia es indispensable para lograr un camino exitoso, y la única forma de tener experiencia es encontrar esa oportunidad que nos permita demostrar cuan preparados estamos.
Cada vez falta menos y las inquietudes resuenan en mi mente. Los temores siempre están, pero también es importante ser optimistas y no perder la convicción en uno mismo y creer que somos capaces de más.
Buen martes.
Pame

domingo, 4 de mayo de 2008

VIOLENCIA: UN ESPIRAL INTERMINABLE

La violencia es ascendente. Las controversias también lo son. A esta altura no se trata de pasarse la pelota unos con otros, ni darse por aludidos o hacerse los desentendidos. Lo que ocurre en la sociedad nos involucra a todos. Somos parte de ella y por lo tanto nos vemos inmersos, independientemente de qué situación estemos pasando, sea buena o mala. En el marco de semejante ola de violencia, es menester poner un stop, actuar, accionar, no simplemente hablar y criticar. Es responsabilidad de todos frenar lo que se ha vuelto algo incontrolable. La juventud se encuentra influenciada en gran manera, tanto por los malos como por los buenos ejemplos, también está en cada uno, qué camino tomar. Si bien hoy en día pocos ejemplos positivos obtenemos en un país donde reina la cultura del menor esfuerzo y de la imposición, se puede revertir la situación o por lo menos comenzar a atenuarla. Ojalá ello ocurra pronto, porque todos queremos descansar cuando apoyamos la cabeza en la almohada, y no vivir con la preocupación de la violencia.
Tampoco puede decirse que en un 100% la responsabilidad es de alguien. Todos contribuimos, para bien o para mal, desde el momento en que fomentamos la violencia, como cuando no hacemos nada para frenarla. Hay responsabilidades parciales. Cada uno opta por uno u otro camino siempre que se le permita. Si uno accede a la violencia como recurso para imponerse, para confrontar o para hacer valer sus derechos, intentando revalidar la ley del más fuerte, será responsable de esa decisión, por eso no puede acusarse en forma completa a los adultos, padres o quien sea. El Estado no queda exento de ser un incitador de la violencia, desde el momento en que permite el patoterismo barato como medio de defensa personal, de rechazo de opiniones distintas, etc. Lamentablemente nuestro país atraviesa un momento en el que la violencia, la inseguridad, el desinteres social son moneda corriente. El espiritu de solidaridad ha sido abandonado y reemplazado por una actitud completamente yoica, egoista y ambiciosa de ascender a cualquier precio. Para erradicar un problema de esta magnitud hay que mirar más adentro, buscar la raíz que permite la propagación de este tipo de conductas. La violencia no surge de la nada, sino que tiene algún impulsor, promotor, algún motivo que la propague a tal escala. Herramientas para combatirla hay. También depende del grado de interés de los responsables de nuestro país. Si ellos no accionan tampoco puede erradicarse el problema. Hay que llegar al meollo, al centro de la cuestión.
Vivimos en una sociedad proclive a la confrontación, al pleito, a la contienda. Por ello es menester empezar por casa, para que así pueda combatirse de raíz la violencia. De esta manera aportaremos nuestro granito de arena, e inculcaremos un espiritu más altruista. Así conseguiremos el renacimiento de los valores, el respeto y la preocupación por el otro.
La violencia nos afecta a todos. Nos involucra a todos. Y esta en cada uno operar para frenarla.